15 septiembre 2016

Domingo 18 septiembre: Moniciones 3 y oración de los fieles 2

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MONICIÓN INICIAL
En medio de nuestras preocupaciones, de nuestros temores, de los agobios y nervios de cada día, nos volvemos a reunir en torno al altar del Señor.
Necesitamos este espacio sagrado -que es la Eucaristía del Domingo- para guardar silencio en nosotros mismos. Para escuchar la Palabra de Dios. Para sentirnos partícipes de un mismo proyecto de Amor que nos renueva y sostiene, y nos impulsa a proseguir el camino de nuestra vida con fe y esperanza.
Participemos, pues, con gran devoción en esta Santa Misa. Y abrámonos a la gracia del Evangelio que es capaz de transformar nuestras vidas.

***
[Este domingo -en nuestra Arquidiócesis- es también el día de la Colecta anual a favor de la Universidad Pontificia de México.
Para nosotros una oportunidad más de ser generosos y compartidos. Y también de experimentar la generosidad de Dios -nuestro Padre providente- «que ama a quien da con alegría y nos regresa el ciento por uno».]

ORACIÓN UNIVERSAL
A Dios -Padre compasivo y misericordioso, que no está lejos de aquellos que lo buscan- presentémosle nuestras plegarias.
A cada petición diremos: ¡Escúchanos, Padre!
1. Por los pastores de la Iglesia. Para que defiendan la justicia y practiquen la misericordia. OREMOS
2. Por el progreso espiritual y material de todos los pueblos. Para que a nadie le falte lo necesario para vivir dignamente. OREMOS
3. Por los que tienen más y pueden más. Para que se acuerden de los pobres.OREMOS.
4. Por los que viven bajo el peso de la penuria y la necesidad. Para que Dios sea su riqueza y nosotros sus amigos. OREMOS
5. Por los jóvenes, por los que viven desilusionados y por los que han abandonado la Iglesia y la fe. Para que encuentren el camino de regreso a Casa. OREMOS
6. Por los estudiantes y los maestros de la Universidad Pontificia de México. Para que con su labor contribuyan al bien de la Iglesia y de nuestro País.OREMOS
7. Por todos nosotros. Para que la participación en la Eucaristía nos ayude a vivir con un corazón desprendido y sensible a las necesidades de los que nos rodean. OREMOS
Muestra, Padre, tu bondad al pueblo que te suplica, para que reciba sin tardanza lo que Te pide con humildad. Por Jesucristo nuestro Señor.

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